Fotografía de Francisco Mesa

Ha sido una auténtica aventura participar en la edición digital de El Día. Acaba una etapa importante de mi vida y he dejado de ser director técnico de internet en Editorial Leoncio Rodríguez, la empresa editora del periódico líder en audiencia (EGM) de Canarias. 

Todo lo que tiene un principio, tiene un final. Ambos hitos son puntos que conectan un camino lleno de experiencias. Me llevo muchos recuerdos, alegrías y un par de másters prácticos en diferentes ámbitos. Pero sobre todo he sido un observador privilegiado que ha podido ver desde dentro y desde diferentes puntos de vista cómo evoluciona y se transforma un sector muy singular. El prisma de las empresas de comunicación tiene muchos matices.

Han sido dos décadas de intensidad, pasión, retos y duro trabajo en una solución que se veía como un problema y que, a estas alturas, como es bien sabido, potenciar la presencia digital más que una cuestión de futuro es un trabajo del presente. Siempre intentando dar lo mejor que tengo y complementando mi formación cuando era necesario. Durante este tiempo han pasado muchas personas de la empresa a realizar las diferentes responsabilidades en este ámbito de internet y siempre he intentado que tuviesen el mejor resultado posible con los medios que teníamos. Aunque la hoja de ruta no estaba previamente trazada, existía una clara visión de lo que debía de hacerse. Han sido años que sentaron las bases de lo que serán nuevos éxitos. Ahora lo tienen casi todo a favor, más aún al pertenecer a un grupo nacional con todo lo que representa. Algo que como profesional me enorgullece especialmente poder decir.

Inicié mi labor en esta Casa con la misión de mantener un producto digital que empezaba. Conseguimos posicionar la web en el liderato regional, multiplicando los registros del segundo medio en difusión. También se consiguió dar soporte al funcionamiento de otros departamentos del periódico y hasta su propia salida en papel impreso en varias ocasiones. Todos frutos de un gran equipo humano del que era parte. Lo que importa es la marca de amplio arraigo y su misión en la sociedad.

He tenido la fortuna de comprobar cómo trabaja un magnífico equipo humano, el auténtico corazón de toda organización. Por mi parte he aportado no tener miedo al cambio, mi apoyo al resto del negocio siempre se ha basado en datos y, siempre que me lo han pedido, he intentado conseguir que El Día siempre esté lo más alto posible. Una labor realmente complicada en el contexto de la prensa y tras los duros y largos años de crisis que han golpeado a esta industria. No tengo más que palabras de agradecimiento para todos los que han participado en este impresionante viaje durante dos décadas. Tanto los que han formado parte de la Casa, como los que lo han hecho desde fuera como proveedores, clientes e incluso competidores. Compañeros en el viaje. Me llevo en la mochila experiencias positivas y las alegrías de superar los retos que fueron apareciendo.

Con limitaciones se evolucionó la imagen de la edición digital en la medida que fue posible, más allá de lo que algunos esperaban. Los futuros resultados del medio con más apoyo y la firme decisión de potenciar definitivamente la digitalización de la empresa solo puede vaticinar éxitos. La prensa local sigue siendo un soporte de influencia y relevancia.

Aprovecho este mensaje de cierre de etapa para darles a todos los que me han apoyado las gracias y agradecer la confianza y el respaldo que me han dado en estos años.

There is one more thing...

Acaba un ciclo y arranca uno nuevo en Lean Mind como Senior Developer. Una joven empresa creada por Carlos Ble Comprometida con la calidad y mejora continua que cuenta tanto con profesionales que han demostrado durante muchos años su talento como con otros que demuestran estar capacitados para trabajar en cualquier lugar que se propongan. Con corazón humano y apoyada en valores que comparto, su eslogan es “Efficient People” y ofrece una apuesta segura para sus clientes en un mundo cada vez más digitalizado. No solo espero aportar mi experiencia y ganas de (intra)emprender, sino mis ganas de compartir, apoyar y aportar más allá de la tecnología.

En este nuevo párrafo profesional que voy a escribir toca seguir diciendo ¡Carpe diem!

@franciscomesa