¿Solo el 2% del tiempo mobile consultando noticias?

Leo en Facebook un informe que indica cómo se están utilizando los dispositivos móviles y tabletas. En EE.UU. de media se utilizan durante 158 minutos al día. No está nada mal si lo comparamos con el tiempo que se está mirando la televisión. La tipología del consumo es la que me llama la atención.
Casi 1 de cada 6 minutos se utiliza para comprobar actualizaciones en Facebook. 2 de cada 6 minutos para jugar. Es decir prácticamente la mitad del tiempo en dispositivos móviles tiene dos mercados: jugar y la red social más popular. Otras redes sociales ocupan el 6% del tiempo de los internautas. El dato que realmente llama la atención es que solo el 2% del tiempo se destina a las apps de noticias. Me gustaría poder realizar una comparativa con el consumo de televisión en EE.UU. pero me atrevo a asegurar que incluso que ese porcentaje es superior en la televisión. Parece que a medida que nace un nuevo canal que sirve de soporte de la comunicación, la atención informativa baja, se diluye por la existencia de otros, pero el uso para el ocio, para una utilización activa, crece.

Basándonos en estos parámetros podemos entender porque el negocio generado por los quioscos digitales es el conocido, contando con las importantes comisiones de las tiendas de apps. Y  algunos medios de éxito, como Financial Times, optan por no ceder un tercio de sus ingresos (sin descontar gastos operativos y los generados hasta la puesta en producción). Otros sin embargo, con el calor de tener una marca global, si que apuestan por este formato.
Que sólo se consulten noticias durante 3,16 minutos al día no significa que los usuarios de dispositivos móviles estén peor informados. Es que existe un ecosistema de información que ofrecen otros canales al que hay que sumar el que genera el soporte pero con una distribución de contenidos que es ajena al propio medio. Es decir, el mundo mobile ha incrementado la situación que empezó con la creación de la web, los medios se enfrentan, ahora con más fuerza, a la nueva situación que genera el periodismo 3.0.
Enlace al estudio.

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