El correo web nos ha liberado del spam, o casi. En mi cuenta de GMail no me entero del correo basura que no he autorizado, con HotMail casi sucede lo mismo, y Yahoo! es el más flojo, porque genera falsos positivos. Es decir,me detecta como spam correo que llega regularmente como alguna de las listas o noticias a las que estoy suscrito. Es decir, el spam tradicional se ha convertido en una especie de resfriado, no mata, pero molesta.
El spam moderno es el que se basa en las redes sociales. Si quieres lanzar un sitio web que alcanza rápidamente el millón de usuarios registrados tienes que facilitar el acceso a los contactos del servicio de mensajería o correo habitual.No son pocos los sitios web que permiten incorporar automáticamente los contactos que ya tenemos en nuestro correo electrónico y enviar una solicitud a los que no estén registrados en esa web. Hi5 es una de las redes sociales de las quemás correos electrónicos he recibido en estos días. Además los “spammers” utilizan la estética y encabezado de estos correos para “colar” sus mensajes. Algo parecido a lo que sucede cuando encontramos la dirección de una web en los comentarios de un foro.
Por estar informado de lo que acontece desde el punto de vista técnico, de gestión, de novedades o investigación recibo miles de correos electrónicos a la semana. Cuando alguien me pregunta si leo el correo, le respondo que estoy borrando spam, porque después de revisarlo por encima, casi todo va a la papelera. De los cientos de enlaces que recibo sólo visito una docena al día. Es una especie de búsqueda del dorado digital de la información.
La mejor forma de controlar el spam es utilizar la dirección de correo electrónico como el número de teléfono móvil, no dejarlo en cualquier sitio, ni a cualquiera.
