En pocas semanas las tarifas combinadas de las tres compañías que dominan el mercado en las telecomunicaciones han sufrido un hachazo importante. Todas han tenido que crear un combo unificando tarifas domésticas de ADSL con su correspondiente paquete de móvil.
Cualquier otro plan anterior para el segundo trimestre de 2013 ha tenido que ser aplazado, modificado, maquillado… ¿Existen modelos de negocios válidos que tengan mayor duración que la fecha de consumo de un litro de leche fresca? El paradigma se puede aplicar a todo tipo de negocios, pero en este inicio de siglo parece claro que todo lo que ahora mismo se convierte en NEW se convierte en pocas horas, a golpe de tweet, whatsapp y comentarios varios, en HISTORY. Esta realidad afecta a todos los ámbitos de la vida y por ese motivo debemos reflexionar sobre la valides de cualquier modelo de negocio.
Hace años un conocido billonario en EEUU apostó por la compra de fondos fotográficos para crear un archivo histórico de fotografias. Era un clásico negocio de contenidos y calidad. La comercialización de los derechos de las imágenes serían una importante fuente de ingresos para el proyecto. Hasta que el uso de internet ha rematado ese negocio. Lo comentaba ayer en Radio EL DÍA. El stream de contenidos es tan intenso, adaptado al nivel de cada uno, que es la capacidad de generar una reacción en un determinado momento lo que define la calidad, no el producto en sí. ¿Cómo ha transformado la Red la gestión y comercialización de los contenidos? ¡TODO ES FREE! Si no lo ofrece A lo podrá mostrar B. Y si no lo hace inmediatamente, al saber que existe, podrá crear una versión «china» a menor coste que será «consumida» por un público mayor.
Los modelos de negocios pueden ser miméticos para la tienda de la esquina, para el ex-famoso video club de barrio, o para una fábrica de contenidos en diferentes formatos y soportes, desde los contenidos impresos a soportes multimedia.
¿El mercado de tablets se ha merendado a los lectores de e-books? ¿Qué forma de mercadeo será válida para mañana, pero anticuada para pasado mañana?
Analizar el presente y mirar con distancia el inmediato futuro permite encontrar las respuestas a un patrón, a una tendencia que es imparable y que llega más rápidamente de lo que creemos. Sin embargo, el día a día, la sensación de aceleración de acontecimientos nos impide realizar una prospectiva.
